Premisas de la escuela positiva en Criminología.

En nuestra anterior entrada del blog comentábamos como la escuela clásica asentó las bases de la criminología, en esta nueva entrada vamos a ver que significo la escuela positiva y cuales fueron sus aportes a la criminología moderna tal como la conocemos hoy en día.

La escuela positiva nace en el siglo XIX con una visión de entender el delito y al delincuente completamente diferente a como lo hace la escuela clásica.

La escuela positiva introdujo la rigurosidad científica en la criminología actual y propulso la prevención del delito a través de programas y políticas públicas y el tratamiento del delincuente, dejando de centrarse tanto en el castigo, como si lo hacía la escuela clásica

Una de las principales diferencias entre ambas escuelas es que la clásica ve el delito como una libre elección de cada persona que actúa en consecuencia (libre albedrío), y la positiva pone el énfasis en el delincuente, utilizando conocimientos científicos, a razón de factores biológicos, sociales y/o psicológicos para delinquir.

Algunos de los autores más destacados de la escuela positiva:

  • Cesare Lombroso: L`uomo delinquente (obra de 1876), médico y antropólogo italiano, es considerado el padre de la escuela positiva, desarrollo la teoría del delincuente nato, el cual lo considera como un ser atávico, con una predisposición biológica delictiva y con pocas posibilidades de rehabilitación.
  • Enrico Ferri: Sociología criminal (obra de 1878), sociólogo y criminólogo italiano, desarrollo una teoría de tipologías delictivas y consideraba que los hechos de los delincuentes era producto de un nexo entre factores biológicos y psicológicos y factores sociales.
  • Raffaele Garofalo: Criminología (obra de 1885), jurista y criminólogo italiano, se focalizó en la peligrosidad del delincuente, con ello consiguió que se impusieran penas de acuerdo al peligro de forma individualizada y a su probabilidad de volver a delinquir.

La escuela positiva nos dejo un aporte importante en lo que es la criminología moderna, como su conocimiento científico, pero dejando a un lado su determinismo y la individualización de las penas.

La Escuela Clásica como Base de la Criminología.

La escuela clásica surge durante el periodo de la ilustración, en el siglo XVIII, debido a las carencias jurídicas y sociales del momento.

La escuela clásica busca explicaciones racionales al hecho delictivo, con un sistema de justicia realmente justo y alternativas más humanitarias sobre el castigo al delincuente.

Propulsores de esta corriente:

Cesare Beccaria es considerado el creador de la escuela clásica, entre sus obras más conocidas podemos encontrar su ensayo jurídico, «De los delitos y las penas» que fue publicada en 1764. Beccaria proponía que las leyes fueran claras, conocidas por todos y aplicables en igualdad para las personas, defendiendo que las penas debían imponerse de forma proporcional al hecho cometido y no a la persona que lo realizo y en consecuencia servir como disuasorias.

Otros autores como Jeremy Bentham defendían un cambio en el sistema penitenciario, siendo menos estricto, como la abolición del sufrimiento o tortura al delincuente, severidad contra el recluso y la limitación de gastos innecesarios para que el reo no se sintiera en prisión mejor que si estuviera en libertad.

Principales premisas de la Escuela Clásica:

El libre albedrío, las personas son seres libres y racionales, con capacidad de diferenciar lo que esta bien de lo que esta mal y actuar en consecuencia.

Los ciudadanos ceden parte de su libertad a cambio de protección por parte de los órganos de control social formal.

Las penas deben ser impuestas según la proporción del delito y del daño ocasionado, prescindiendo en todo caso de las características o situaciones del autor.

Diferencias entre la Escuela Clásica y la Escuela Positiva:

  • Escuela Clásica: usa un método lógico-deductivo o filosófico, tiene como objeto de estudio o enfoque el delito, que por las causas del delito o naturaleza se centra en el libre albedrío, tratando al delincuente como un ser racional, y siendo el objetivo de la pena compensar el daño por el delito cometido.
  • Escuela Positiva: usa un método hipotético-inductivo o científico, tiene como objeto de estudio o enfoque al delincuente, que por las causas del delito o naturaleza se centra en factores antropológicos, biológicos o conducta determinada, tratando al delincuente como un ser enfermo, y siendo el objetivo de la pena el tratamiento de la peligrosidad del delincuente.

En resumen: la escuela clásica asentó las bases de la criminología moderna, utiliza un método lógico-deductivo separándose por ello de la rigurosidad científica, busca un sistema de justicia más equilibrado y humanitario, siendo el delincuente un ser racional que actúa en consecuencia.